NUTRICIÓN BASADA EN EVIDENCIA
Desmitificando el papel del jugo de naranja en los resfriados: la verdad detrás del mito popular Por: Licdo. José Sebastián Sánchez Tlatelpa, Licenciado en Farmacia, Universidad Autónoma del Estado de Morelos (UAEM)
Todos hemos escuchado alguna vez, dentro de nuestra comunidad, que el jugo de naranja es bueno para combatir los resfriados, una creencia arraigada en la cultura popular que ha sido transmitida de generación en generación. Sin embargo, ¿qué pasaría si te dijera que esta afirmación no es del todo correcta, y que, por el contrario, podría interferir con la mejoría de los síntomas? Este es solo un ejemplo de cómo los mitos y las creencias populares pueden influir en nuestras decisiones de salud, a menudo sin considerar las evidencias científicas detrás de ellas. Es crucial entender la importancia de consultar fuentes confiables y basar nuestras decisiones de salud en la evidencia disponible. En este artículo, desmitificamos el papel del jugo de naranja en los resfriados, explorando la verdad detrás de esta creencia arraigada en la cultura popular.
La naranja en fruta vs la naranja en jugo
La naranja es una excelente fuente de ácido ascórbico, mejor conocido como vitamina C, así como de otros importantes nutrientes que ayudan a fortalecer el sistema inmune. Sin embargo, la mayoría de las personas la prefieren consumir en forma de jugos, sin tener en cuenta que el zumo de naranja carece de fibra y contiene menos vitaminas y minerales que la fruta entera, aportando en su mayoría carbohidratos. Esta es la razón por la cual especialistas en nutrición recomiendan siempre el consumo de la fruta entera fresca en lugar de jugos, para poder así ingerir y aprovechar todos los nutrientes.
¿El jugo de naranja ayuda en el combate contra los resfriados?
Aunque es cierto que la vitamina C es importante para tener un sistema inmunológico sano, no existe evidencia significativa de que la ingesta de vitamina C durante el resfriado ayude significativamente a reducir el tiempo de este, según un estudio comparativo que incluyó 3249 pacientes en siete ensayos.
Lo que sí está demostrado es que la naranja contiene algunas moléculas, como furanocumarinas (sustancia que proviene de ciertas plantas y que se encuentra en las frutas cítricas) y flavonoides (como la naringina), que pueden interferir con la acción de las enzimas metabolizadoras del hígado, conocidas como enzimas CYP-450. Estas enzimas son responsables de metabolizar o transformar los fármacos para que puedan ser desechados correctamente del organismo o activar la acción de los medicamentos, en algunos casos específicos, llamados "profármacos", para que puedan ejercer su efecto terapéutico en el organismo.
La naranja podría interferir en la efectividad de los medicamentos
Si te encuentras cursando un resfriado y estás bajo tratamiento médico, es importante tener en cuenta que el consumo de jugo de naranja podría interferir con la efectividad de los medicamentos recetados. Esta interferencia podría resultar en una disminución del efecto terapéutico de los medicamentos, lo que a su vez podría ralentizar tu proceso de recuperación.
En resumen, el consumo de la naranja como fruta entera es una excelente fuente de vitamina C, que sirve para mantener un sistema inmune fuerte, disminuyendo así el riesgo de presentar resfriados. Pero, es importante abstenerse unos cuantos días de su consumo si nos encontramos en tratamiento, para evitar las interacciones fármaco-alimentarias descritas anteriormente y poder recuperarnos de forma efectiva.
Aunque el jugo de naranja puede ser delicioso y nutritivo, su consumo durante un resfriado no es tan beneficioso como podría pensarse. Es esencial mantener un equilibrio entre los beneficios de la vitamina C y los posibles efectos secundarios cuando se está bajo tratamiento médico.
Referencias:
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